Los valores éticos para el éxito empresarial

La ética se basa en un conjunto de valores morales y éticos. Estos valores deben ser absolutos,es decir, debemos tomar en serio lo suficiente como para anular cualquier razonamiento humano, la debilidad, el ego, o faltas personales. Cuando todo falla, los valores fundamentales siempre nos guiarán. Por desgracia, la vida no es tan fácil y siempre hay desacuerdo acerca de qué valores debe reinar

Por suerte, en el mundo de la ética empresarial, su empleador le ayuda. En pocas palabras, sus valores son sus valores (en el contexto del trabajo). Su libertad de elegir sus propios valores éticos es un poco limitado,teniendo en cuenta la ola de escándalos corporativos en estos días, la idea de seguir los valores de la corporación no puede ser muy reconfortante. Problema: ¿De quién o de qué valores se puede confiar?

Debemos mirar detrás de negocios exitosos, honestos y podremos ver un conjunto de valores que han resistido la prueba del tiempo. Piense acerca de cómo estos valores se comunican en su organización y lo que puede hacer para apoyarlos.

Honestidad. El viejo adagio, “la honestidad es la mejor política” es verdad hoy más que nunca. No se trata sólo de boquilla, los manuales de los empleados de las empresas más escandalizadas probablemente contengan consignas que promocionan su compromiso con la honestidad. Pretendiendo ser honesto en un manual del empleado está pasado de moda, eres honesto o no, incluso si no lo han detectado, sin embargo, la mayoría de la gente sabe quién es y quién no lo es.

Integridad. Integridad connota la fuerza y la estabilidad. Esto significa tomar el camino mediante la práctica de los más altos estándares éticos. Demostrar la integridad demuestra integridad y solidez en su carácter y en su organización.

Responsabilidad. Culpar a otros, alegando ser víctima, o pasar la pelota para resolver crisis de corto plazo, es la negativa a asumir la responsabilidad, esto erosiona el respeto y la cohesión en una organización. Las personas éticas asumen la responsabilidad por sus acciones, del mismo modo, las acciones muestran la capacidad de ser responsable tanto en las cosas pequeñas  como en las grandes.

Calidad. La calidad debe ser más que hacer el mejor producto, sino que debe extenderse a todos los aspectos de su trabajo. Una persona que reconoce la calidad y se esfuerza para que todos los días tenga un profundo sentido de respeto propio, el orgullo en sus logros, y la atención que afecta a todo, es una persona rica en valores éticos. A partir de sus notas a sus presentaciones, todo lo que toque deben comunicar profesionalidad y calidad.

Confianza. No hay viaje gratis. La confianza es difícil de ganar y aún más difícil que vuelva después de haberlo perdido. Todo el que entra en contacto con usted o su empresa debe contar con la confianza y la confianza en la forma de hacer negocios.

Respeto. El respeto es más que un sentimiento, sino una demostración de honor, valor y respeto por algo o alguien. Nosotros respetamos las leyes, las personas con las que trabajamos, la empresa y sus activos, y de nosotros mismos.

El trabajo en equipo. Dos o más empleados en conjunto forman un equipo. Se trata de una necesidad de la empresa de trabajar abiertamente y con apoyo en equipos, ya sea formal o informal.

Liderazgo. ¿Cuántos trabajadores, empleados honestos han sido contaminados y desviados por fallas de liderazgo corporativo? Gerentes y ejecutivos deben mantener las normas éticas para toda la organización. Un líder esta al frente con un ejemplo que otros sigan.

Ciudadanía Corporativa. Un principio fundamental para toda empresa debe ser proporcionar un lugar de trabajo seguro, para proteger el medio ambiente, y llegar a ser buenos ciudadanos en la comunidad.

Valor para el accionista. Sin rentabilidad, no hay empresa. Todos los empleados deben entender cómo él o ella encaja en el cuadro rentabilidad. Objetivo común de todo el mundo debe ser construir una empresa sólida, rentable, que dure.

La prueba real de estos valores viene de la acción resultante. Se necesita un esfuerzo concertado de toda la compañía el esfuerzo, más allá de la inserción de estas palabras en un manual del empleado, para que esto ocurra.